En la fresca y soleada mañana del 27 de Febrero de 2015 un grupo de valientes chavales nos dirigimos a conquistar Alsasua, concretamente al colegio de los Corazonistas. Este grupo los formamos por chavales de 1º, 2º, 3º, y 4º de la ESO de Egibide. Una vez allí, nos repartimos en 6 pueblos históricos y poderosos distintos: Egipcios, Vascones, Romanos, Cartagineses, Hunos, y Vikingos.
El gran desembarco de Egipcios, Vascones,
Romanos, Cartagineses y Hunos
Todos excepto los Vikingos nos encontrabamos en Alsasua, porque los nórdicos venían desde el frio Egino dispuestos a conquistarlo todo. Mientras los Vikingos caminaban sin cesar atravesando pueblos y valles, los demás grupos realizamos un juego de pistas por todo Alsasua para obtener la victoria (¡Qué expectación levantabamos las diferentes pruebas entre las gente del pueblo).
Los Vikingos antes de su salida
desde Egino
Pero toda batalla precisa de aliados así, que los pueblos fuimos aliándonos entre nosotros para obtener la victoria. Los Vikingos seguían su camino desconociendo las alianzas que estábamos formando: Los elegantes Egipcios se aliaron con los bravos Cartagineses, los poderosos Romanos con los trabajadores Vascones, y los salvajes Hunos esperaban formar equipo junto a los intrépidos Vikingos.
Una prueba sabrosa la que tenía
el General Puellum
Los Vikingos llegaron al anochecer por sorpresa, arrasándolo todo y secuestrando a algunos de sus oponentes para ir metiéndonos miedo, pero una vez calmados aceptaron la colaboración con los Hunos de Atila. Y todos juntos celebramos una fastuosa cena con grandes bailes demostrando nuestras fascinantes y ricas culturas. La comida, preparada por los pastoralistas, siempre es un bien que hay que compartir aún en tiempos de lucha, y más si son los mismísimos Marco Antonio y Cleopatra los anfitriones. Tras la fiesta, celebramos una pequeña oración para poder repasar el día intenso vivido.
Una gran cena con un gran ambiente
A la mañana siguiente, tras el merecido descanso y la oración de la mañana vímos como los Cartagineses iban en cabeza dispuestos a llevarse la victoria final. Por lo que los demás pueblos nos pusimos manos a la obra para competir en el Kermex, y así poder conseguir arrebatarles el primer puesto.
La victoria exige sacrificios
Tras una copiosa comida y una siesta más que merecida, el recuento final dio la victoria a los Romanos, por lo que teníamos que preparar una gran fiesta para celebrarlo y, también, despedir el año con tantos buenos amigos que habíamos hecho.
Ya en tiempos de paz todos juntos preparamos la Eucaristía para agradecer y despedir este gran campamento. En la Eucaristía, presidida por Diego, demostramos que todos teníamos motivos por los que dar gracias, ofrecer, pedir perdón... todo al ritmo de las guitarras de Sergio y Alba, que nos dieron la oportunidad de cantar.
Momento de las ofrendas
en la eucaristía
Tras la Eucaristía nos tocó limpiar la casa, para que asi nadie pueda descubrir si hubo o no batalla en Alsasua. Y como siempre, tras esa maravillosa mañana, nos tocó irnos a comer a la espera de coger el bus de vuelta a casa con el recuerdo de la gran aventura vivida con la gente de Tiempo Libre Egibide
GRACIAS Y HASTA LA PROXIMA.
No hay comentarios:
Publicar un comentario